La agenda exterior de Colombia sumará una visita oficial a China entre el 10 y el 17 de mayo, mientras continúa en curso la negociación arancelaria con Estados Unidos.
La información fue difundida en el marco de la presidencia pro tempore de Colombia en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), según fuentes oficiales citadas en medios nacionales.
Dirigentes empresariales manifestaron inquietud por el contexto de esta visita.
Uno de los cuestionamientos más mencionados es la posibilidad de que esta iniciativa afecte las conversaciones con el Gobierno estadounidense, especialmente ante la solicitud colombiana de reducción de aranceles del 10 % a productos de exportación.
Otro punto destacado por los gremios fue la intención del Gobierno colombiano de avanzar en su adhesión a la iniciativa internacional denominada Franja y Ruta, impulsada por el Gobierno chino.
De acuerdo con referentes del comercio exterior, el vínculo con China podría implicar cambios estructurales que afecten tanto la protección comercial como las condiciones del aparato productivo nacional.
Se mencionaron posibles riesgos relacionados con subsidios estatales, ajustes de divisas y los mecanismos de defensa comercial vigentes.
Además, se advirtió que la clasificación de China como economía de mercado podría traer consecuencias sobre la competitividad local.
Organizaciones empresariales latinoamericanas también emitieron comunicados señalando que, en un escenario de incertidumbre, cualquier mensaje contrario a las relaciones tradicionales con Estados Unidos podría dificultar las negociaciones para la reducción de barreras comerciales.