La participación del presidente de Rusia en la Cumbre de los BRICS, prevista para el 6 y 7 de julio en Brasil, fue descartada debido a una orden de arresto emitida en su contra por la Corte Penal Internacional (CPI) en 2023, durante el conflicto con Ucrania.
Desde el Kremlin explicaron que la decisión está vinculada a complicaciones relacionadas con los requerimientos del tribunal internacional.
La CPI responsabiliza al mandatario de crímenes de lesa humanidad, específicamente por la deportación forzada de menores desde Ucrania hacia territorio ruso.
Rusia no ha suscrito el tratado fundacional de la CPI, pero la orden podría tener efectos en los países firmantes, entre ellos Brasil, lo que representa un riesgo en caso de traslado.
La cumbre tampoco contará con la asistencia presencial del presidente de China. Según un funcionario del gobierno brasileño, el país asiático estará representado por su primer ministro.
La ausencia se atribuye a cuestiones de agenda interna y se enmarca en un contexto de tensiones geopolíticas con Estados Unidos.
El bloque BRICS se expandió el año pasado e incorporó a Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Etiopía, sumándose a los cinco países fundadores.
La cumbre se desarrollará en un escenario de crecientes desafíos internacionales y busca consolidar el papel del bloque en el escenario global.