
El Gobierno de Estados Unidos proyecta que la oferta mundial de petróleo aumentará en 2,1 millones de barriles diarios en el cuarto trimestre de este año en comparación con el primero.
Se trata del mayor incremento registrado en este periodo desde febrero.
Tanto la Agencia Internacional de Energía (AIE) como la Administración de Información Energética de Estados Unidos revisaron sus estimaciones al alza.
Ambos organismos esperan que la producción supere a la demanda en niveles no observados desde la pandemia, con una diferencia proyectada de 2 millones de barriles diarios para el año siguiente.
Estas previsiones consideran factores como el aumento de la actividad fuera del grupo OPEP+, nuevas fuentes operativas en países no miembros y una expectativa de mayor suministro de biocombustibles.
Mientras las estimaciones de superávit ganan fuerza, se mantienen indicios de una demanda sostenida de productos derivados del crudo.
Las cifras semanales en Estados Unidos muestran niveles máximos en lo que va del año, y se ha registrado un aumento en el consumo de combustible para aviación, respaldado por un mayor volumen de vuelos.

Además, las proyecciones de demanda históricamente han sido ajustadas al alza con el paso del tiempo, según registros de la AIE entre 2012 y 2024.
Analistas del sector prevén que hacia la segunda mitad del año podrían generarse acumulaciones de crudo cercanas a los 200 millones de barriles, lo que podría comenzar a reflejarse en los inventarios visibles de países de la OCDE.
Por ahora, los almacenamientos en los principales centros globales permanecen bajos, y los precios se mantienen cerca de los USD 70 por barril, a pesar del escenario de mayor oferta previsto por las agencias internacionales.