
Los gobiernos de Brasil y Estados Unidos mantienen conversaciones de alto nivel para resolver disputas bilaterales que involucran aranceles y sanciones comerciales.
El diálogo se retomó luego de recientes encuentros diplomáticos, donde ambas partes acordaron continuar con las negociaciones en los próximos días, buscando una resolución rápida sobre temas pendientes relacionados al comercio y las restricciones impuestas en años anteriores.
Las discusiones entre ambos países se reactivaron tras meses de desacuerdos sobre medidas arancelarias aplicadas a exportaciones brasileñas.
El gobierno brasileño planteó la necesidad de revisar los aranceles del 50% que afectan productos clave y solicitó la eliminación de sanciones a funcionarios judiciales, argumentando que las mismas se basaron en información incorrecta.

Durante las reuniones se mencionó el déficit comercial anual que mantiene Brasil con Estados Unidos, así como la intención de presentar propuestas que aborden cuestiones de regulación tecnológica, redes sociales, centros de datos y minerales críticos, sectores considerados relevantes para las futuras relaciones económicas entre ambos países.
Además, se espera que la agenda de conversaciones incluya la cooperación en materias ambientales y energéticas, en el marco de próximos encuentros multilaterales donde ambos gobiernos participarán.
Brasil posee la segunda mayor reserva mundial de tierras raras, elemento clave en la producción de dispositivos electrónicos y vehículos eléctricos. Este factor otorga al país una posición estratégica en las negociaciones, ya que busca atraer inversiones y ampliar su rol en el suministro de materiales esenciales para la industria global.