Misiles fueron lanzados desde Irán contra una instalación militar estadounidense ubicada en Catar, según informaron medios internacionales citando fuentes de inteligencia occidentales.
De acuerdo con la agencia Tasnim, el ataque ocurrió luego de una serie de operaciones militares previas en instalaciones nucleares iraníes.
La ofensiva fue interceptada y no se reportaron víctimas.
El ataque se dirigió a la base aérea de Al Udeid, que alberga a miles de militares de Estados Unidos y opera como centro regional del Mando Central estadounidense para Medio Oriente.
El lanzamiento involucró al menos seis misiles.
Gran parte del personal militar ya había sido evacuado antes del ataque, según información difundida por fuentes consultadas por agencias internacionales.
Previo al suceso, las embajadas de Estados Unidos y Reino Unido en Catar emitieron recomendaciones a sus ciudadanos para que permanecieran en sus residencias hasta nuevo aviso.
A su vez, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin procedieron a cerrar su espacio aéreo como medida de precaución.
El Ministerio de Asuntos Exteriores catarí declaró que los avisos diplomáticos no necesariamente implican una amenaza directa, calificándolos de acciones de rutina ante escenarios de posible tensión.
Pocos minutos después del ataque, los precios del petróleo registraron una caída. El barril de Brent descendió un 3,3% hasta alcanzar los USD 74,48, de acuerdo con reportes internacionales.