
Durante el tercer trimestre del año, la demanda global de oro llegó a 1.313 toneladas, la cifra más alta registrada hasta la fecha, de acuerdo con un informe del World Gold Council. El volumen total incluye las operaciones fuera del mercado bursátil y se concentró entre los meses de julio y septiembre.
En términos de valor, la compra global del metal precioso alcanzó USD 146.000 millones, lo que representa un incremento interanual del
El aumento en la demanda estuvo impulsado por la adquisición de fondos cotizados (ETF) y las compras de bancos centrales, que se consolidaron como los principales motores del crecimiento.
Las compras netas de fondos respaldados en oro totalizaron 222 toneladas, el mayor volumen trimestral desde 2020. A esto se sumaron 316 toneladas en barras y monedas, completando el cuarto trimestre consecutivo por encima de las 300 toneladas.
Por parte de los bancos centrales, las adquisiciones alcanzaron 220 toneladas en el tercer trimestre, lo que representa un incremento de 28% respecto al trimestre anterior. Entre los mayores compradores figuran países de Asia y Sudamérica.

El precio promedio del oro durante el tercer trimestre se situó en USD 3.456 por onza, con un aumento interanual del 40%, marcando trece máximos históricos en el periodo.
La alta cotización generó ajustes en el consumo de joyería. Aunque el valor total de las compras aumentó 13% interanual, el volumen cayó 19%, con consumidores que optaron por piezas más livianas o de menor pureza.
La producción minera mundial mostró un crecimiento de 2% interanual, alcanzando 977 toneladas. Sumando el reciclaje, el suministro total de oro llegó a 1.313 toneladas.
El estudio destaca que, a lo largo de 2025, la mitad de la demanda mundial estuvo concentrada en barras, monedas y fondos de inversión, consolidando al oro como uno de los activos más demandados en el mercado internacional.