
El guaraní se posiciona como la moneda con mayor apreciación frente al dólar en América Latina durante 2025.
En lo que va del año, la moneda paraguaya acumuló una suba superior al 17% frente a la divisa estadounidense, superando el desempeño de otras monedas de la región.
Este comportamiento se da en un contexto de debilidad global del dólar y de una mayor entrada de divisas al país.
Las proyecciones económicas para Paraguay muestran expansiones relevantes del producto interno bruto.
De acuerdo con estimaciones de la Cepal, el crecimiento previsto alcanza 5,5% en 2025 y 4,5% en 2026.
Por su parte, el Banco Central del Paraguay proyecta una expansión del 6% para 2025 y del 4,2% para 2026.
Estas previsiones se vinculan con mayores ingresos de divisas asociados a exportaciones e inversiones.
La inflación se mantiene en torno al 4% anual, con una proyección de desaceleración hasta 3,5% durante 2026, según datos oficiales.
La tasa de interés de referencia se mantiene en 6%, nivel que no ha registrado cambios desde marzo de 2024.
Desde la autoridad monetaria se indicó que el seguimiento de la evolución interna y externa continúa como parte del esquema de política monetaria.
Entre enero y noviembre, las exportaciones de soja alcanzaron USD 2.348,1 millones, lo que representó una variación interanual negativa del 25,1%, de acuerdo con cifras del Banco Central del Paraguay.
En paralelo, las exportaciones de carne y menudencias bovinas sumaron USD 1.984 millones en el mismo periodo, con un aumento del 24,3% interanual.
A estos flujos se agregan ingresos provenientes del comercio fronterizo y de otros sectores dinámicos de la economía.

Datos recopilados por Bloomberg indican que la economía paraguaya, estimada en USD 47.000 millones, mantiene una alta dependencia del comercio con países vecinos.
Argentina y Brasil concentraron cerca del 63% de las exportaciones paraguayas durante el último año.
Entre enero y noviembre, Brasil explicó el 30,9% del total de los envíos, por un valor de USD 3.208,4 millones.
El tránsito fronterizo y el régimen de libre circulación en pasos clave continúan siendo componentes centrales de este intercambio comercial.
Las proyecciones para el corto plazo apuntan a un tipo de cambio que se mantendría en niveles similares a los actuales durante el primer semestre de 2026.