De acuerdo con un informe del Banco Central de Brasil, el índice de actividad económica cayó 0,06% en junio en comparación con mayo. Este resultado representó la segunda variación mensual negativa consecutiva.
En términos interanuales, el indicador mostró un incremento de 1,38% respecto a junio del año anterior.
El informe recordó que entre septiembre y junio las autoridades monetarias elevaron los costos de financiamiento en 4,5 puntos porcentuales, llevando la tasa de referencia a un nivel no observado en casi dos décadas.
En su encuentro del 29 y 30 de julio, el consejo del Banco Central señaló que mantendrá una posición de cautela en la conducción de la política monetaria, en un escenario marcado también por la aplicación de un arancel de 50% a los productos brasileños en Estados Unidos.
En paralelo, la encuesta realizada por el Banco Central a economistas redujo la estimación de inflación para finales de 2025.
Las previsiones pasaron de 5,05% a 4,95%, situándose por primera vez desde enero por debajo del 5%.