
El Instituto Nacional de Estadística (INE) presentó los principales indicadores sobre la situación de la juventud paraguaya de entre 15 y 29 años, basados en los resultados de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC) del año 2024.
Según el informe, 1,5 millones de personas integran este grupo etario, lo que representa el 25,4% de la población nacional. De ese total, el 18,4% se encuentra en situación de pobreza, equivalente a 275.067 jóvenes, mientras que en las zonas rurales la proporción asciende al 24,3% y en las urbanas al 15,1%.
Del total de jóvenes del país, 745.425 son hombres (49,6%) y 758.832 mujeres (50,4%). La mayoría reside en áreas urbanas, alcanzando un 64,3%, mientras que el 35,7% vive en el campo.
En cuanto al estado civil, 7 de cada 10 jóvenes son solteros, y aproximadamente 2 de cada 10 viven en pareja, ya sea casados o en unión libre.
Más de la mitad de los jóvenes entre 15 y 24 años (51,6%) asisten a instituciones de enseñanza formal. No obstante, la diferencia entre el campo y la ciudad es considerable: 55,6% en zonas urbanas frente a 44,5% en áreas rurales.

El acceso a salud también muestra contrastes. Solo el 23,5% de la población juvenil cuenta con seguro médico, con mayor cobertura en el área urbana (29,5%) frente al 12,9% del sector rural.
Cerca de 6 de cada 10 jóvenes realizan actividades económicas, integrando la población ocupada del país. Sin embargo, los niveles de ingreso y estabilidad laboral presentan diferencias significativas entre regiones.
En muchos casos, los jóvenes estudian, trabajan y buscan progresar en un entorno donde los recursos no siempre acompañan sus aspiraciones. Ser joven en Paraguay hoy significa tener sueños grandes pero bolsillos vacíos, una realidad que refleja los desafíos estructurales que enfrentan miles de personas al iniciar su vida adulta.
El informe del INE señala que las desigualdades territoriales continúan marcando el acceso a oportunidades, especialmente en materia educativa, sanitaria y laboral.