Un alto funcionario del gobierno estadounidense ofreció declaraciones sobre la confrontación entre el expresidente y el director ejecutivo de una reconocida empresa tecnológica, tras el cruce de mensajes públicos registrado días atrás.
Durante una entrevista emitida en un espacio digital, el vicepresidente expresó que la confrontación no es oportuna y calificó como un “gran error” la postura del empresario frente al líder político.
Agregó además su deseo de que la situación pueda encaminarse nuevamente, pese al nivel que alcanzó el intercambio público.
El desacuerdo surgió luego de que el empresario criticara un proyecto de ley impulsado por el expresidente, el cual plantea modificaciones fiscales que afectarían beneficios ligados a vehículos eléctricos.
La crítica fue respondida por el exmandatario con declaraciones en tono personal, lo que intensificó el conflicto.
Ambos actores habían mantenido vínculos políticos en el pasado. El empresario había sido parte de una iniciativa oficial orientada a implementar medidas de austeridad en la administración pública, aunque no se concretaron los resultados proyectados.
Fuentes cercanas al entorno del gobierno estadounidense mencionaron que la postura del presidente es evitar un conflicto directo con el empresario y promover un ambiente menos confrontativo.
En ese sentido, el vicepresidente manifestó que aún existe la posibilidad de superar las diferencias si se logra bajar la intensidad del intercambio.
Estas declaraciones representan la primera reacción directa desde el Ejecutivo luego del cruce público entre ambos referentes.