
El sector importador proyecta un cierre de año con mayor actividad, tras un semestre inicial afectado por factores logísticos y cambiarios.
Según datos proporcionados por el Centro de Importadores del Paraguay, la formalización de ingresos de productos y la mejora en los servicios de transporte están entre los elementos que impulsan estas expectativas.
Entre enero y marzo, las operaciones se vieron limitadas por la bajante del río y el encarecimiento de los fletes internacionales desde oriente.
A esto se sumó la suba del dólar, que llegó a niveles cercanos a 7.900 guaraníes, encareciendo la importación de bienes.
En el segundo semestre, el panorama comenzó a modificarse con la disminución del contrabando proveniente de Argentina y una cotización del dólar más favorable para el comercio exterior.
Además, los precios de productos importados cayeron entre 5% y 10%, otorgando mayor competitividad a la oferta formal.

El ingreso informal de mercaderías continúa siendo un reto para el rubro. Factores externos, como la política monetaria de Brasil y el diferencial cambiario en Argentina, pueden incentivar nuevamente el contrabando hacia el mercado paraguayo.
El aumento del valor del peaje en la Hidrovía Paraná–Paraguay también genera preocupación. El costo pasó de 1,20 a 1,47 dólares por tonelada de registro neto en el tramo Santa Fe–Confluencia. De acuerdo con el gremio, esta medida unilateral del gobierno argentino fue aplicada sin lograr consenso previo en las negociaciones.